Otredades
Exhibidas las fallas de comunicación en caso Gertz
Por José Sobrevilla
Sin duda esta columna se debería llamar “La soberbia del poder II” porque en el manejo informativo del caso Gertz Manero, la comunicación social institucional operó con arrogancia, sin estrategia y, como siempre, teniendo desperdiciados tantos buenos estrategas comunicacionales en distintas dependencias; por eso la reacción fue caótica. Seguramente usted −amable lector− se ha preguntado por qué reaccionaron así los principales actores de la política mexicana ante la salida Gertz Manero de la FGR y la llegada de Ernestina Godoy, y los principales errores de comunicación de Presidencia en este aquelarre desinformativo.
Sí. El suceso generó una fuerte división en la política mexicana: la oposición denunciando un «golpe» de Morena para sacarlo, mientras el oficialismo presentaba su salida como una «decisión personal». PAN y PRI cuestionaron la falta de explicaciones claras y que Gertz habría sido presionado para que renunciara, calificando la acción como un movimiento político disfrazado. Morena y aliados respaldaron a Gertz y resaltaron la figura de Ernestina Godoy.
Ella, Godoy, quien dejó su cargo como consejera Jurídica de la Presidencia, fue presentada −sin faltar a la verdad− como figura cercana y de confianza de Claudia Sheinbaum y Morena, generando las críticas de analistas que advirtieron una posible ‘alineación total de la Fiscalía con el gobierno en turno’, poniendo en duda su autonomía e independencia. Antes, Godoy había sido acusada por la oposición de ser un relevo político que favorece a Morena y la administración presidencial. Otra conjetura sería difícil de creer.
Fueron evidentes las fallas de comunicación de la Presidencia en el destape de Godoy, porque evidenciaron descoordinación y falta de transparencia, provocando confusión en varios sectores, así como críticas por cómo fue manejado el anuncio. sobre la salida de Gertz, Presidencia jamás ofreció una mayor explicación, alimentando versiones y especulaciones sobre presiones internas, generando un impacto negativo en la percepción pública y política del relevo. Anteriormente, Godoy había tenido enfrentamientos con los medios por reclamos de desinformación, lo que vino a añadir otro elemento a la compleja comunicación del gobierno en esta coyuntura.
Así, la reacción política habría sido polarizada, con una oposición que denuncia presión política y falta de autonomía en la Fiscalía, y un oficialismo que la defiende como una transición natural y estratégica. La comunicación presidencial, sobre el proceso, ha sido motivo de críticas por errores y falta de claridad, afectando el clima político en torno al relevo en la FGR.
¿Qué errores de comunicación han detectado los especialistas? particularmente en la falta de claridad y coordinación en la transición. Confusión y especulación durante el proceso, especialmente porque Gertz habría hecho un movimiento de último momento para colocar a Godoy como encargada de la Fiscalía antes de presentar su renuncia, generando cuestionamientos sobre la legalidad y transparencia del enroque. Además, la comunicación oficial fue tardía y no previa al anuncio formal, provocando un vacío informativo y especulaciones en medios y Senado.
Otro fallo fue la ausencia de una comunicación fluida desde Palacio Nacional que permitiera anticipar y administrar mejor el cambio para evitar incertidumbre en la opinión pública y dentro de la propia Fiscalía. Se criticó también la gestión de Gertz por no entender completamente el tamaño de su responsabilidad y mezclar lo público con lo privado, afectando la percepción pública de este movimiento, y la llegada de Godoy, que fue vista en un contexto político muy marcado y con fuertes cuestionamientos de opacidad y maniobras internas.
En fin, los errores de comunicación giraron en torno a la falta de previsión en una transición tan sensible, coordinación insuficiente entre los actores involucrados, y escasa transparencia en la información oficial sobre los motivos, procedimientos y consecuencias del relevo que llevó a Ernestina Godoy a asumir ‘interinamente’ el cargo.
Si queremos ser puntuales: 1) Falta de concreción y claridad en el mensaje, el cual debió ser directo, breve y empático, lo que al no cumplirse generó confusión en la audiencia sobre los motivos y procesos del cambio. 2) Retrasos y rectificaciones en la comunicación oficial, lo que generó un desfase entre los hechos y la información dada, afectando la credibilidad institucional. 3) Escasa empatía y liderazgo comunicativo, pues el mensaje no logró conectar emocionalmente con la ciudadanía ni mostrar un perfil cálido y confiable.
4) Cacofonía o exceso de voces institucionales, que resultaron en mensajes contradictorios o descoordinados, dificultando la recepción clara de la información. Y, 5) Ausencia de una estrategia comunicativa con enfoque claro, segmentación adecuada y repetición de mensajes prioritarios para asegurar una correcta comprensión y aceptación.
Estas fallas redujeron la efectividad del mensaje institucional y afectaron la percepción pública del proceso de relevo en la Fiscalía. ¿Qué es lo que va a pasar? Que la oposición buscará alegar que dicha remoción o salida de Gertz, violentó disposiciones constitucionales e incumplió los requisitos legales para la remoción de un fiscal. Esta acción seguramente será presentada ante la Corte para que revise si la norma o acto impugnado transgrede la Constitución, en este caso la autonomía y el procedimiento para relevar al fiscal.
También podrán interponer amparos para detener o revertir los actos relacionados con el cambio, argumentando que hubo violación de derechos y procedimientos que dañan la independencia de la Fiscalía. Los opositores también −seguramente− fundamentarán su impugnación en el artículo 102 constitucional y normas de la Ley Orgánica de la Fiscalía, que regulan la remoción del fiscal solo por causa grave y conforme a un procedimiento legislativo claro y transparente. Recursos con los que intentarán que la SCJN declare la ilegalidad del procedimiento y restablezca la autonomía institucional.
Los opositores han advertido que la impugnación será un proceso largo y que puede incluir demandas judiciales para invalidar la designación de Ernestina Godoy en caso de que se considere ilegal el relevo. También podrá impugnar el procedimiento de salida de Alejandro Gertz Manero mediante una controversia constitucional, o acción de inconstitucionalidad, con plazos de 30 días contados desde la publicación en el Diario Oficial de la Federación (DOF), notificación o conocimiento del acto.
Nota: Esta columna se escribió considerando la información pública y publicada en medios particularmente digitales.
