Con tractores afuera de San Lázaro, la diputada presidenta advirtió que la Ley de Aguas impactará a 600 mil concesionarios.
Ante la inminente discusión de la nueva Ley de Aguas en la Cámara de Diputados, Kenia López Rabadán advirtió sobre las consecuencias sociales de aprobar la reforma sin escuchar a los sectores afectados. La presidenta de la Mesa Directiva recordó que esta semana sostuvo reuniones con campesinos y productores de 11 estados, quienes solicitaron detener el proceso legislativo para exponer sus argumentos sobre la gestión del recurso hídrico y la creciente inseguridad en el campo mexicano.
«La Ley de Aguas es una ley que va a impactar de manera directa a casi 600 mil personas que tienen en este momento una concesión», explicó Kenia López Rabadán. La legisladora subrayó que existen voces que reclaman atención y que no han sido debidamente escuchadas por la mayoría parlamentaria, señalando que los temas de desarrollo agrícola y seguridad son indivisibles en la realidad actual del país.
Mientras se definía la agenda al interior del recinto, el exterior del Palacio Legislativo de San Lázaro fue escenario de una manifestación masiva con tractores y camiones. Kenia López Rabadán reconoció la civilidad de la protesta, calificándola de «absolutamente respetuosa», y agradeció la disposición al diálogo de los agricultores que acudieron a ejercer su derecho a la manifestación en busca de certeza para su actividad productiva.
